RECETA PARA OBTENER LA FELICIDA
• Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
• Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.
• Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.
• Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
• Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
• Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
• Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
• Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
• Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
Puedes pensar que alguna de las cosas que Jesús enseñó lucen bastante difíciles, y estás en lo correcto. Aun cuando tengas una receta, puede ser muy difícil seguirla, pero si sigues las instrucciones a la letra, puedes estar seguro de lograr un buen resultado. Jesús no nos prometió que la vida sería siempre fácil, pero sí dijo que si seguíamos las enseñanzas de la lección de hoy, ¡podremos estar seguros de que recibiremos la bendición de Dios y que seremos felices de verdad!
Amado Padre, te damos gracias por las enseñanzas de Jesús. Aun cuando la vida no sea siempre fácil, sabemos que si seguimos sus enseñanzas, seremos bendecidos. Oramos en el nombre de Jesús. Amén.
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